Cine, series y literatura en verano

 Cine, series y literatura en verano

Literatura en este verano

En este verano he leído una más de las muchas novelas policíacas situadas en Venecia de la escritora Donna Leon. Es un entretenimiento agradable sobre todo para los que ya conocemos  los personajes de este grupo de novelas de la autora. Me refiero al inspector Brunetti y su familia. La obra leída ahora se llama Cosecharás tempestades. Es agradable dentro de este género literario y llena el tiempo de ocio veraniego sin más pretensiones.

También disfruté de una de las mejores obras de Elvira Lindo, que atrapa y convierte en inolvidables a los personajes que viven en sus paginas. Merece la pena su lectura o su re lectura ya que esta novela tiene casi quince o veinte años. Se titula: Una palabra tuya.

Pero sin duda, la mejor obra literaria que leí este verano es Los hermanos Burgess de Elizabeth Strout. Excelente. Buena escritura y buena historia que refleja a los seres humanos individualmente y en familia.

Cine y televisión

I)

Tráiler de Godland:  https://youtu.be/8ZCR2d2Zuwc 

Días pasados vi Godland y después leí la crítica de Sergi Sánchez (La Razón) con la que coincidí en muchas cosas sobre esta obra. Se trata de una película  danesa y la historia se desarrolla en Islandia en el siglo pasado. Está dirigida por H. Palmason.

 

Sergi Sánchez escribe: "No es extraño que sea una fotografía negada la que sirva como catarsis dramática de una película que se inspira en las siete primeras fotografías que se conservan del sureste de Islandia. Como si esa imagen que se resiste a ser robada de la realidad, la que no obedece a la puesta en escena que quiere ordenar la belleza de lo terrible, fuera la única que puede decirnos la verdad: sobre el silencio de Dios pero también sobre la miseria del hombre, tal vez también sobre el futuro del ser y la carne, que es convertirse en tierra y hierba, y dejarse engullir por la naturaleza. Puede que algunos de los planos cenitales de “Godland” nos hagan pensar en una mirada divina, y que su protagonista sea un sacerdote danés con una misión casi imposible -cruzar una tierra ignota, hermosa y hostil, para construir una iglesia- sirva para elaborar un discurso sobre la búsqueda de la fe y la trascendencia, pero es difícil imaginar una película más agnóstica que “Godland”, porque de lo que aquí se trata es de reivindicar la materia orgánica de los cuerpos y la naturaleza. Que el sacerdote esté obsesionado con fotografiar el mundo lo convierte en una suerte de protocineasta que ha olvidado conectarse con la vida, que quiere embalsamar el paisaje y sus habitantes como un conquistador de imágenes, y la película, ferozmente anticolonialista -podría leerse como un western, donde los daneses son los blancos y los islandeses, los indios-, quiere demostrar que las imágenes no se conquistan, que existen por sí mismas, que son tan bellas e implacables como el ciclo de las estaciones, como esa naturaleza majestuosa y punitiva que impone sus leyes ante la arrogancia de los hombres, abrumados por la venganza y la culpa".

Es una película peculiar que seguramente no gustará a gran parte del público. Yo la valoré más positivamente transcurridos unos días desde que la había visto. Además de las observaciones que hace Sergi Sánchez en el párrafo anterior, lo que a mí me impactó es constatar el esfuerzo titánico del homo sapiens para lograr objetivos planteados ya sean estos por cuestiones religiosas, económicas o simplemente por avanzar y adaptarse a lugares desconocidos y muchas veces hostiles. La fotografía es excelente y la interpretación también muy destacada.

 

II)

Desde hace dos décadas el director de cine, Laurent Cantet no ha dejado de analizar la actualidad que nos rodea. Utiliza su cine, como un microscopio, que busca soluciones a problemas sociales, también entra en los debates que agitan la sociedad y en los más recónditos y rugosos pliegues de los pilares de la convivencia. (Fotograma). En esta película se aborda la influencia enorme en el éxito y caída que pueden deparar las redes sociales/internet en la actual sociedad.

Un escritor en alza y casi subido a los altares, cae abruptamente cuando se conocen unos tuits que había publicado unos años atrás y que contenían mensajes abiertamente racistas, antisemitas, homófobos y misóginos. El cineasta describe este descenso a los infiernos de Arthur Rambo (personaje principal). Encumbrado de la noche a la mañana y defenestrado en cuestión de minutos, demuestra la extraordinaria fuerza que tienen hoy las redes sociales. Película muy entretenida y recomendable pero nada original.

III)

La directora suiza Úrsula Meier nos ofrece una película entretenida donde hay una mirada a una familia parcialmente desestructurada  que está inmersa en una patología psicológica que navega en todo el filme. Bien interpretada. Atrapa durante la visión de la película pero no deja luego nada más.

IV)

Serie corta de televisión: The Architect

Muy sugerente, con unos fotogramas excelentes que reflejan el ánimo de los personajes y el entorno social. Una distopía futurista pero muy cercana a nuestra realidad donde se aborda el tema de la vivienda, sobre todo en personas jóvenes o también en aquellas que han quedado excluidas de la sociedad individualista y muy alejada del estado del bienestar. La historia se desarrolla en Noruega pero es válida para cualquier país desarrollado.

Me pareció bastante aceptable pero me ha dejado la sensación de que ha quedado a medio camino de lo que apuntaba al principio de la serie. Aún así, la recomiendo, creo que es muy interesante.

JHP