Los vencejos. Última obra de Fernando Aramburu

Los vencejos. Última obra de Fernando Aramburu



Sinopsis: Los vencejos cuenta el último año de Toni, un profesor de instituto decepcionado y enfadado con el mundo, que decide con frialdad y determinación poner fin a su vida en una fecha concreta. Para entonces, espera averiguar cuáles son las razones que le han llevado a semejante determinación.

He leído varios libros de Aramburu pero hasta ahora los que más me habían gustado habían sido Patria y Autorretrato sin mí.

Patria es una de las obras que más he apreciado de las leídas en estos últimos años. Me gustó tanto el fondo como el contenido. La forma magistral en la que está escrita y el tema que aborda con una sensibilidad y posicionamiento digna de las mejores obras de la literatura reciente. Autorretrato sin mí es una prosa poética de extraordinaria sensibilibidad hacia la vida y a las relaciones entre las personas.

Por todo ello tenía una gran expectativa sobre el último libro de Aramburu que se publicó solo hace unas semanas.

Los vencejos, como leí en alguna parte no es un libro para cualquier lector. Quizás esa afirmación sea correcta. Está muy bien escrito, te invita al final de cada micro capítulo a seguir leyendo, entretiene, pero no reconoces en el a su autor. Quizás esa sea una cualidad y no un defecto pero en ese sentido a mí  me decepcionó moderadamente.

Es posible que lo que yo suelo buscar en una obra literaria no sea compartido por muchísimos y buenos lectores pero yo busco no solo entretenimiento, si no historias cercanas o lejanas, íntimas o con contenido social o histórico, que contemple y exponga a través de sus personajes valores humanos que por contrapuestos que puedan ser  nos sirvan para pensar, meditar, conocer y elegir orientaciones éticas o morales en los individuos de la sociedad. Al igual que pienso que el cine, además de la contemplación estética o técnica de una obra nos sirva a las personas para intentar ser mejores. Sin duda que esta idea no es compartida por muchos expertos en arte pero así yo lo siento. Lo mismo que pido para el cine pido a la literatura.

Los vencejos entretiene y muestra realidades humanas en conflicto o en un desesperanzado vivir donde no se encuentra ningún valor moral o ético rescatable. Todos son “malos”. El personaje principal que habla en primera persona en individualista, misántropo, misógino, sexista, "salido" crónico, ve solo a la mujer como cuerpo para fornicar, no le gustan las personas en general, tampoco nadie de su familia ni sus alumnos y solo por algún interés común comparte una amistad con otra persona de similares características.

Las causas de este tipo de personalidades la dejo para el análisis de los psicólogos y además de lo genético sin duda que habrá elementos personales y sociales además del momento histórico y  el tipo de sociedad en las que estos personajes desarrollan su vida.

Repito, la obra entretiene, ¿pero aporta algo?. Alguien me preguntará si es que una obra literaria debe aportar algo. Yo creo que sí, aunque puedo estar equivocado.

Durante su lectura sentí sensaciones similares a las que tuve cuando ya hace años leí otros libros “inolvidables” por la ausencia de personajes que transmitieran valores que a las personas nos hiciesen mejores. Aunque con temas diferentes sentí las mismas sensaciones negativas en obras como Santuario de William Faulkner, Las benévolas de Jonathan Littell y 2066 de Roberto Bolaño.

En dichas obras se tratan temas muy diferentes. En Los Vencejos trata de una problemática más individualista pero tienen en común la maldad humana, la falta de empatía y de esperanza basada en la inexistencia de valores solidarios y comunitarios.

No soy ecuánime al juzgar esta obra dada quizás mi equivocada visión de pedir al arte algo más que entretenimiento, técnica o belleza.

En resumen, Los Vencejos entretiene pero no deja nada después de cerrar el libro o quizás solo la desesperanza en el ser humano.

Comentarios

  1. Buenos días a todos en el final d este verano q nos ha dado malos ratos con incendios tremendos y el despertar d ese volcán cruel y hermos a la vez. Os deseo un buen otoño y q siga bajando la tasa d incidencia del coronavirus.
    Salud y bienestar

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